La inflación aumentó en sentido ascendente en febrero en el Reino Unido, con un alza del 10,4% interanual frente al 10,1% de enero, empujada por los precios de los alimentos y las prendas, indicó la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS) británica.

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“Los precios del alcohol en alza en los pubs y los restaurants” contribuirá mucho a este rebote sorpresivo, así como «la alimentación y las bebidas no alcohólicas, que suieron al ritmo más rápido en más de 45 años», subrayó Grant Fitzner, economista de la ONS.

«El retroceso de la inflación no es inevitable, tenemos que respetar nuestro plan para dividir por dos la inflación este año»insistió el ministro de Finanzas británico, Jeremy Hunt, en un comunicado, ante una decisión del Banco de Inglaterra sobre los temas de interés.

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El banco central tiene que actuar para por un lado squid la disparada de los precios en plena crisis del costo de vida en el Reino Unidoy por otro no afectará el crecimiento en un país al borde de la recesión.

AFP