Encaramado en una colina en el centro de Río, el barrio de Santa Teresa es un laberinto de calles empedradas, tortuosas y empinadas, donde decrépitas mansiones que datan del siglo XIXmi siglo. El hotel Chez Georges está ubicado en la curva de un callejón empinado. Se accede por un ascensor acristalado que se abre a una pasarela suspendida en la vegetación. Esta villa modernista de 1.000 metros cuadrados, adornada con maderas exóticas, es obra del arquitecto carioca Wladimir Alves de Souza. La entrada está marcada por una pérgola de hormigón arqueada en medio de árboles de plátano. Pierre Bident Moldeva, un ex industrial francés, pasó dos años transformando esta casa en un hotel con siete suites. Se construyó una dependencia con un estudio de grabación para los músicos en residencia, así como una piscina de 13 metros de largo con vista panorámica a la Bahía de Guanabara y al Pan de Azúcar, en el corazón de un jardín tropical.

El salon.

En el interior, los muebles de las décadas de 1950 a 1970 se encontraron en todo el mundo o en los alrededores, como las sillas del diseñador brasileño Ricardo Fasanello. Cada suite rinde homenaje a ilustres músicos de nombre Georges, como George Harrison o Seu Jorge. Arriba, el George Benson tiene una cama tamaño king, una sala de estar, un escritorio y un baño de mármol azul. Su terraza da al jardín donde lagartijas y titíes corren por los troncos de los árboles, al son de los encantadores cantos de gorriones y papagayos.

en lo de george, Ladeira do Meireles, 90, Santa Teresa, Río de Janeiro. Desde 200 euros la noche, desayuno incluido.

300 metros de distancia: encontrar fotos antiguas

La tienda La Vereda.

La Vereda es una pequeña tienda desarrollada en un antiguo bar de samba, a pocos pasos de una estación del bondinho, uno de los tranvías más antiguos del mundo. La propietaria argentina, María Victoria Matute, selecciona creaciones de artistas y artesanos del barrio. También ofrece copias de fotografías antiguas de Río, incluidas tomas de las playas de Copacabana e Ipanema antes del hormigonado de la costanera y Corcovado antes de la construcción de la estatua del Cristo Redentor.

Calle Almirante Alexandrino, 428.

A 300 metros: escucha bossa nova en directo

Ubicado en una antigua residencia colonial con fachada blanca y persianas azul cobalto, Casa Nossa tiene un bar en el primer piso y un restaurante en el segundo. Se organizan conciertos de música en directo –samba, bossa-nova o forró– al mediodía y por la noche, en las terrazas o en los salones interiores, según la climatología. Viajeros y lugareños se reúnen allí para tomar una cerveza fría o una caipirinha.

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