Se sustituye un templo hindú en el sur de la India al elefante de carne de hueso por uno mecanico para llevar a cabo sus ceremonias, en un intento por luchar contra el maltrato y la caza furtiva de este animal, considerado sagrado por el hinduismo.

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La iniciativa novedosa, llevada a cabo en un templo hindú del estado sureño de Kerala, nació de una donación promovida por l’organización en favor de los derechos de los Animaux People for the Ethical Treatment of Animals (PETA) que promovió una intensa campaña en el país para proteger a los paquidermos.

El elefante robótico «ayudará a que las ceremonias en los templos se lleven a cabo de forma segura y sin crueldad, apoyando así la rehabilitación real de los elefantes y la vida en los bosques, poniendo fin al horror del cautiverio“, explicó a EFE la oficina de comunicaciones de PETA India.

Con unos 11 pies de altura y un peso de 800 kilogramos, el elefante-robot, llamado Irinjadappilly Raman, es capaz de transportar hasta cinco personas y sus movimientos pueden controlarse con un mando.

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PETA espera que esta iniciativa se extienda a otros estados de India para abandonar la práctica habitual de estas criaturas en los rituales hindúes, donde en ocasiones se utilizan para transportar a los dioses en procesiones y ceremonias, perturbaciones a costa de maltrato.

La población de elefantes asiáticos se concentra en el sur de la India, generalmente sus retenidos o transportados de forma ilegal a otras regiones, ya menudo mueren por estar encadenados Durante largas horas sin acceso a agua oa la atención veterinaria.

Un grupo a favor de los derechos de los animales instó recientemente a las autoridades estatales a iniciar una seria investigación sobre las frecuentes muertes de elefantes. El Centro de Investigación sobre los Derechos de los Animales (CRAR) registró la muerte de 138 elefantes cautivos entre 2018 y 2023 en solo Kerala.

EFE